LÓPEZ SIMÓN, oreja de ley en su alternativa en La Maestranza

López Simón dio un paso al frente el día de su alternativa. Cartel de lujo, con Morante de la Puebla como padrino y José María Manzanares, testigo de la ceremonia. El novillero madrileño no titubeó. Quizá el destino, quizá la suerte... "Asustado" fue devuelto para que "Juncoso", sobrero de Núñez del Cuvillo, saliese de los toriles. El torero encontró "su" toro. Firme ya en el capote con su concepto vertical del toreo, prescindió de brindis y tras recibir los trastos de manos de Morante y dar un emotivo abrazo a éste, y a Manzanares, pidió permiso a la presidencia, y se fue a los medios. El terno, blanco y oro, relucía. Lo aguardó atornillado al albero de La Maestranza y trazó un cambiado por la espalda, para seguir, de rodillas, ligando una tanda con la mano derecha que obtuvo una serie de olés en el tendido por respuesta.

Se cruzó, alternando zurda y diestra, presentando sus credenciales sin dar muestra alguna de nerviosismo. Tomó la espada, se perfiló, y resultó prendido al entrar a matar. Oreja de ley el día de su alternativa; la paseó, con la sangre brotando ya de la taleguilla. También por su propio pie, entró en la enfermería, donde fue intervenido y no pudo lidiar el segundo de su lote.